El fármaco por excelencia que regula tu sueño es una hormona que fabricas tú mismo de manera natural. Sin embargo, con la carga de trabajo, estrés y responsabilidades se llegan a desarrollar ciertos trastornos de sueño no deseables y hay que darle una ayudadita al cuerpo.
«La tomé en su momento y es que su efecto realmente alivia. Hasta personas que la consumían me recomendaron tomar dos o más dependiendo cómo me sentaba».
Esas palabras prueban la tendencia a tomar dosis mayores que las recomendadas. Y es que si se vuelve un ritual, la cosa ya se vuelve hábito. Ahora, si llevas años o meses consumiéndola: ¡Atención! Porque dejarlas puede resultar complicado, bastantes usuarios bajo adicción a la melatonina han comentado su difícil experiencia al querer dejar de tomarla.
No está comprobado que cause adicción grave, pero la mente todo lo puede y si alguien piensa que la necesita como yo pienso que necesito mi osito de peluche para dormir, pues, informo que sí será una relación dependiente.
Recurrir a fármacos es una buena solución, sólo recuerda que no son una ayuda divina e infinita, a veces es bueno darle la oportunidad a tu cuerpo y a tu mente de desarrollar formas alternas de volver a producir melatonina suficiente.
Fuentes:
Somos Adicción 