La verdad es que con las nuevas tecnologías se nos han facilitado algunas tareas y quizá nos estamos haciendo cada vez más dependientes a la IA, así que es mejor estar alerta a las señales. En esta nota te hablamos sobre las posibilidades de una adicción y lo que se podría hacer al respecto.
Recordemos que cualquier actividad que dé placer es susceptible de convertirse en adictiva.
Estamos a un año de haberse lanzado ChatGPT y es importante saber que para prevenir una posible adicción es importante controlar la cantidad de tiempo que se permanece conectado.

“Las tecnoadicciones son conductas que la persona lleva a cabo de forma compulsiva y sin capacidad de control, convirtiéndola en una prioridad. Este proceso adictivo se desarrolla poco a poco y sin que el afectado se dé cuenta”, señala la psicóloga Gabriela Paoli, especializada en nuevas tecnologías.
Uno puede encontrar empatía con un ‘chatbot’ y sentir que al otro lado de la pantalla hay otra persona que lo escucha, entiende y le responde humanamente, además que le resuelve casi todo.
Ha incrementado la soledad afectando a un número creciente de jóvenes y la IA puede ser vista como un remedio.

Para prevenir una posible adicción a los chatbots, Paoli recomienda ser consciente del uso que se les da. Aunque aún es un fenómeno en estudio, está claro que es mejor llevar esta tecnología de manera consciente y equilibrada en nuestra vida cotidiana.
La comodidad y la ausencia de presiones sociales pueden hacer que prefieran interactuar con estas herramientas tecnológicas en lugar de con amigos o colegas humanos, y por un rato no está mal, pero si es todo el tiempo, ya debemos dudarlo.

Fuentes:
