Los hipersexuales son adictos a la actividad sexual en todos los sentidos, tanto que dejan de hacer las cosas cotidianas por dar espacio a eso.
La hipersexualidad es un trastorno que, como todas las adicciones, a la larga puede generar lesiones en las neuronas y en los neurotransmisores que son los encargados de llevar el bienestar a través del cuerpo con estímulos, en el caso de la hipersexualidad se vería afectado el placer de una persona y por eso busca más y diferentes maneras de conseguir esas sensaciones lo que eventualmente se convertirá en una adicción difícil de dejar.

Los hipersexuales buscan tener relaciones sexuales en todo momento, ya sea con su pareja, con otras personas, pagan por ello o incluso gastan fuertes sumas de dinero en páginas pornográficas; esta adicción no esta lejos de ser grave, ya que además de tener efectos de salud a largo plazo tiene consecuencias en la manera de relacionarse con otros, en las relaciones con amigos o con la propia familia.
Los especialistas aseguran que es un aumento en la lívido constante que no detiene la imaginación de los que padecen este trastorno, al ser un impulso excesivo se tiene que detectar, ya que hay riesgo de contraer enfermedades de transmisión sexual.

¿Cómo se sabe que se es hipersexual? Cuando las emociones son imposibles de controlar, los impulsos son excesivos y la ansiedad viene acompañada de un estrés constante son claros indicios de que se tiene el trastorno.
La adicción puede venir de problemas emocionales que son aliviados con los químicos que produce el cerebro cuándo hay encuentros sexuales constantes, es importante que se reconozcan los indicios de la hipersexualidad para poder tratarla con un especialista y tener una vida tranquila.

Referencias: